Energías renovables en casas. ¿Cuáles son las mejores?

¿Estás pensando en instalar energías renovables en tu casa o empresa? ¿Cuáles son las mejores? ¿No sabes por dónde empezar? Aquí encontrarás las respuestas y descubrirás las mejores energías renovables en casas.

Hay diferentes tecnologías disponibles, cada una con sus propias ventajas y consideraciones. Y aunque hay que tener en cuenta muchas cosas antes de instalar un sistema renovable, tener uno en casa podría ayudar a reducir las facturas de energía y la huella de carbono del hogar.

En primer lugar, tendrás que informarte sobre las posibles tecnologías y considerar lo que es posible para tu casa. Algunas tecnologías simplemente no serán adecuadas. Por ejemplo, algunas tecnologías tienen requisitos específicos para su instalación:

  • Los sistemas solares fotovoltaicos y térmicos dependen de la orientación de tu tejado.
  • La energía solar térmica, las bombas de calor y la biomasa requieren espacio interior y exterior.
  • Los sistemas hidroeléctricos requieren un arroyo o río cercano.

Contenido:

Energías renovables para casas o viviendas

Una vez que hayas reducido la lista de tecnologías posibles, puedes clasificarlas en función de su rendimiento para tus necesidades energéticas.

Las energías renovables pueden clasificarse como:

  • Las que generan electricidad, como las turbinas eólicas y los paneles solares.
  • Las que generan calor, como los sistemas solares de calentamiento de agua y las bombas de calor.

Hay algunas preguntas clave a las que deberás responder para ir reduciendo aún más qué energías renovables para el hogar son las más adecuadas. ¿Quieres sustituir tu actual sistema de calefacción? ¿Buscas ahorrar energía y hacer que tu casa sea más sostenible, o buscas qué tecnología puede ahorrarte más dinero? ¿Debe el sistema satisfacer todas tus necesidades energéticas o funcionará como apoyo a otro?

¿Por qué quieres cambiar a la energía renovable?

Esto influirá en la tecnología más adecuada para ti. Muchas personas quieren ahorrar dinero y reducir sus emisiones, pero también hay que tener en cuenta otras cosas:

Si tienes que sustituir la caldera o el sistema de calefacción central, es una oportunidad para alejarse de un sistema de calefacción con combustibles fósiles, como una caldera de gas.

Si tu prioridad es ahorrar dióxido de carbono, piensa en una bomba de calor, una gran turbina eólica o un gran sistema solar fotovoltaico.

Si vives en una propiedad rural aislada sin electricidad de red, puedes obtener el suministro más fiable fuera de la red a partir de la energía hidroeléctrica o de una mezcla de energía eólica y solar fotovoltaica.

¿Es tu casa lo más eficiente energéticamente posible?

Si estás pensando en instalar un sistema de calefacción renovable, aislar tu casa te ayudará a sacar el máximo partido a tu nuevo sistema. De este modo, se garantiza que el calor que se genera se mantenga en la casa, en lugar de perderse a través del tejado, las ventanas, las puertas o las paredes. Cuanto menos calor pierda, menos tendrá que generar.

Si quieres generar tu propia electricidad a partir de energías renovables para casas, reducir la cantidad de energía que utilizas en tu hogar puede hacer que lo que generes rinda más. También puedes plantearte cambios en tu estilo de vida, como trasladar tu consumo de electricidad a las horas del día en las que tu sistema solar fotovoltaico está generando electricidad. Así como tener en cuenta algunos de los consejos que te indicamos para ayudarte a utilizar tus electrodomésticos, la iluminación y el agua de forma más eficiente.

¿Cómo funcionan las etiquetas energéticas?

Cuando vayas a comprar un nuevo electrodoméstico para tu casa, fíjate en su etiqueta energética. La etiqueta energética te indica la cantidad de energía que consume ese electrodoméstico, comparándolo con otros similares. Esto puede ayudarte a encontrar los electrodomésticos que menos energía consumen. También debes tener en cuenta el tamaño del electrodoméstico que necesitas.

Los electrodomésticos se someten a pruebas para determinar la cantidad de energía que consumen durante un uso típico. Esto les da una clasificación en una escala de la A a la G, siendo la A el producto más eficiente de su clase, y la G el menos eficiente. Algunos aparatos utilizan una escala más antigua, de la A+++ a la G, siendo la A+++ la más eficiente.

En general, los electrodomésticos se clasifican por su tamaño. Esto significa que dos electrodomésticos de distinto tamaño con la misma clasificación energética pueden consumir cantidades diferentes de electricidad. Por ejemplo, el funcionamiento de un frigorífico de 265 litros con clasificación G puede costar unos 60 euros al año (75kgCO2e), mientras que el funcionamiento de un frigorífico más grande de 424 litros con clasificación F puede costar unos 65 euros (90kgCO2e) al año.

Lo mejor es comprobar la etiqueta energética del aparato y buscar el producto con la mejor clasificación energética para el tamaño que necesitas.

La iluminación de bajo consumo

La iluminación de bajo consumo ayuda a reducir las facturas de electricidad y las emisiones de dióxido de carbono, todo ello sin reducir la calidad de la luz en nuestros hogares.

Si sustituyes todas las bombillas de tu casa por luces LED, podrías reducir sus emisiones de dióxido de carbono hasta en 40 kg al año. Esto equivale al dióxido de carbono que se emite al conducir el coche unos 140 kilómetros.

La iluminación representa el 15% del consumo medio de electricidad de las viviendas, por lo que hacer el cambio también podría ayudarte a ahorrar dinero.

Ahorro de agua en el hogar

Muchos de nosotros no somos conscientes de que el uso del agua en casa contribuye a nuestras facturas de energía y a las emisiones de carbono de nuestro hogar.

Ahorrar agua puede reducir la factura del agua (si tienes un contador), reducir el uso de energía y las facturas, reducir el impacto en el medio ambiente local y reducir las emisiones de dióxido de carbono (CO2) al utilizar menos energía para bombear, calentar y tratar el agua.

El agua está intrínsecamente ligada a la energía. Pero la mayoría de nosotros subestima la energía que necesitan las compañías de agua para tratar y bombear el agua a los hogares.

Unos sencillos cambios en el uso del agua pueden ahorrarte dinero y reducir la cantidad de agua que desperdicias. Además, existen varios productos para ahorrar agua que te facilitarán el ahorro.

energias renovables en casas
  • Cambia la alcachofa o cabezal de la ducha

Si una familia de cuatro miembros sustituye su cabezal de ducha ineficiente por uno de bajo consumo, podría ahorrar unos 35 euros en la factura del gas y unos 45 euros en la del agua (si tiene contador) cada año. Esto supone un ahorro total de unos 80 euros.

  • Apagar el grifo

Un grifo abierto desperdicia más de tres litros de agua por minuto, así que cierra el grifo mientras te cepillas los dientes, te afeitas o te lavas la cara. Utiliza agua fría si no necesitas caliente.

  • Evita los goteos

Un grifo que gotea puede desperdiciar más de 5.500 litros de agua al año, así que asegúrate de que tus grifos están bien cerrados y cambia las arandelas rápidamente cuando los grifos empiecen a gotear.

  • Máxima capacidad

Asegúrate de que los lavavajillas y las lavadoras están llenos antes de usarlos, y asegúrate de utilizar regularmente los ajustes de agua y energía más eficientes.

  • Ley de la suciedad

Utilizar una palangana para fregar en lugar de un grifo abierto puede ahorrarte dinero en las facturas de agua y energía. De hecho, sólo es necesario dejar correr un grifo normal durante 95 segundos antes de llenar un bol para lavar. Si necesitas aclarar los utensilios o lavar las verduras, utiliza agua fría si es posible y no dejes el grifo abierto.

Después de leer este artículo sobre las energías renovables en casas. ¿Cuáles son las mejores? espero que te haya dado suficientes datos para tener claro que las casas con energías renovables son posibles y necesarias. Cada hogar tiene sus opciones, solo hace falta estudiarlo bien para determinar las que mejor se ajustan a tus necesidades.

Deseo que después de leer este artículo sepas al menos, por dónde empezar y que nuestros consejos te ayuden a reducir tu huella de carbono y a su vez tus facturas, quizás entonces te gustaría compartir nuestro contenido con tus allegados para que ellos también se beneficien de ello.